vendredi 15 août 2008

heartache

Salen las lágrimas. Te decís a vos mismo que no es tu culpa. Las retuviste mucho tiempo… tenían que salir. Con las lagrimas llega la bronca… golpeas, gritas, rompes. Sentís como tu corazón se retuerce adentro tuyo. Estas así un rato… de repente te quedas quieta. Contenés la respiración unos segundos… te das cuenta que llegó la peor parte. Te invade la tristeza. Ya no sentís la bronca, no sentís tu corazón retorciéndose. No sentís nada más que esa angustia. Miras para todos lados, estas sola. Sos solo vos y tu tristeza. Intentas levantarte… no lo logras. Ya no tenés fuerzas. Cuando la depresión llego a tu cuerpo, las fuerzas se tuvieron que ir. No había lugar para las dos adentro tuyo. Así que intentas recuperar las fuerzas… ya es tarde, están demasiado lejos para volver. Entra tu mama, te pregunta si queres comer algo. Pensas en aceptar, crees que quizás la comida te haga sentir menos vacía. Solo tardaste un segundo en darte cuenta que era una idea estúpida… nada te hace sentir menos vacía. Así que simplemente rechazas la oferta. Resignada, tu mama baja la cabeza y se va. Otra vez sola. Te preguntas a vos misma que hacer.. unos segundos después encontraste la respuesta.. vos misma te la diste: levantate y viví. Pero con esa respuesta llega otra pregunta. Como haces eso si no tenés fuerzas? Solo tenés esa terrible angustia adentro tuyo. Otra vez vos tenés la respuesta. Si no podes levantarte con fuerzas, levantate sin fuerzas. Pensas.. cuando eras chiquita ibas al colegio contenta. Después creciste y ya no te gusta ir al colegio… pero vas igual. Si no tenés esa alegría para ir al colegio, vas sin la alegría…. Si no tenés las fuerzas para levantarte, te levantas sin las fuerzas. Volves a intentarlo.. lo logras. Ya estas de pie, es un paso. Empezas a caminar, te encontras con el espejo. Miras tu cara, tus ojos hinchados y rojos. Tu pelo despeinado. Te arreglas como podes. Abrís la puerta, ves a todos viviendo. Empezas a vivir otra vez. No, no recuperaste la fuerza. Solo estas aprendiendo a vivir con lo que tenés.. o mejor dicho con lo que no tenés: fuerza.